jueves, 13 de marzo de 2014

Adios

Quisiera saber cómo decirte adiós.  Es tan estúpido, he vivido acunando palabras entre mis brazos, las he entrelazando formando las más bellas oraciones, las he lanzado como manzanas envenenadas en épocas de guerra. Y ahora, cuando recurro a ellas, me han abandonado.  Las he llamado a gritos, quería despedirte de forma mordaz y desafiante, quería herirte como tú lo has hecho. Pero ahora ya no puedo lograr nada de eso, pues respondiendo a mis gritos han venido los recuerdos; se cuelan entre mis dedos, inundan mis ojos con espejismos de tú y yo.

Te prometo que intento luchar contra ellos, pero a veces simplemente cierro mis párpados y me dejo llevar por aquella ola de la memoria. Me transporta a tiempos felices, donde las tormentas aún no se divisaban en el horizonte, donde la inocencia era nuestra compañera de juegos. Tardes en las que pensaba que conocía la felicidad.

¿Qué nos pasó? ¿Acaso tú no me querías del modo que yo lo hacía? ¿Acaso estábamos condenados a desaparecer, como la nieve en primavera?

Detesto los puntos finales. ¿Por qué me obligas a usarlos ahora? No quiero terminar está historia, deseo seguir escribiéndola hasta que la tinta se acabe y mis manos estén viejas arrugadas, hasta que mis ojos no puedan seguir viendo con claridad el papel y mi respiración sea débil y cansada. Ahora solo hay páginas vacías, que se llenan con todo lo que podríamos haber sido tú y yo, con los momentos que nunca viviremos y los secretos que jamás serán desvelados.

Te odio tanto, pero solo porque un día te quise. Te odio por el futuro que me quitaste. Pero, principalmente, te odio porque nunca dudaste al marcharte ni echaste la vista atrás mientras salías por la puerta.

Me prometiste que nunca me dejarías. Pero tus promesas se convirtieron en aire, y este se perdió en la inmensidad del cielo, donde yo ya no puedo alcanzarle



martes, 4 de marzo de 2014

Bienvenidos

Supongo que la primera palabra que debo decir, es "Bienvenidos". Algunos os preguntaréis que es este lugar, este lugar es simplemente yo. Mis pensamientos, mis dudas, mis relatos, mis sueños... Aquí subiré lo primero que me venga a la cabeza, desde relatos, a canciones, debates o fotografías tomadas por mí. Un pequeño cajón del desastre, exactamente como mi cabeza.

¿Por qué el nombre del blog? Fácil, por si no lo habéis adivinado todavía, mi poema favorito siempre ha sido "Volverán las oscuras golondrinas". Y quería traer un trocito de él a aquí, compartirlo con vosotros. 

No sé que más decir, excepto, que espero que disfrutéis con este pequeño rincón. Al menos tanto, como yo lo hago.

Bienvenidos, a allí donde vuelven las golondrinas.